La ‘sombra’ de la burbuja sobre un mercado de la vivienda que aguarda más subidas:​ «Estamos como a principios de los 2000»

El problema de la vivienda es desde hace meses la principal preocupación de los españoles, según el CIS. Cada vez son más los que se topan con serias dificultades para poder pagar un techo bajo el que desarrollar un proyecto de vida, una realidad que contrasta con el comportamiento de un mercado residencial en plena expansión en el que tanto la compraventa de pisos como los precios no dejan de crecer.

 

En medio de este escenario sobrevuela el interrogante de si puede repetirse una burbuja como la que estalló en 2008, aunque por el momento todas las previsiones apuntan a que sigue habiendo una demanda fuerte de vivienda y a que los precios seguirán creciendo.

«Una burbuja especulativa es una subida persistente y generalizada del precio de un bien que progresivamente se aleja de su valor fundamental», explican los expertos. «Esto hace que el comprador crea que es mejor comprar ahora que esperar, porque saldrá más caro, y el vendedor, que también lo sabe, sigue subiendo el precio», añade. Salcedo llama a la prudencia y descarta por el momento emplear este término para referirse al panorama actual, aunque reconoce que «se parece cada vez más a la situación en la que estalló la burbuja de 2008, salvando las distancias» y que la subida de los precios está siendo tal que cada vez son menos los que pueden comprar un piso.

Según los datos del INE, el primer trimestre de 2025 cerró con un alza media en el precio de la vivienda de un 12,2% con respecto a principios de 2024, la más abultada de la serie histórica desde el 13,1% registrado a comienzos de 2007. Este ascenso, que se suma al incremento del 8,4% del año pasado y a los de años anteriores, evoca la escalada registrada hace dos décadas. Las estadísticas del Ministerio de Vivienda indican que entre 2001 y 2006 el precio medio de los inmuebles creció ininterrumpidamente por encima del 9%, llegando a registrarse subidas interanuales por encima del 17% en 2003 y 2005.

El alza actual es fruto del desajuste entre una oferta de vivienda escasa y una demanda fuerte que se asienta sobre una población cada vez más numerosa —desde 2021 España ha ganado un millón de hogares, según datos del INE— y más concentrada en las grandes ciudades, a lo que se suma el apetito de quienes apuestan por la vivienda como vía de inversión. Prueba de la fortaleza de la demanda es que en mayo se vendieron 61.054 viviendas, un 39,7% más que en el mismo mes de 2024 y el mayor volumen de operaciones para un quinto mes del año desde 2007.

 

 

[Fuente «20 minutos»]